Mientras en los mapas conceptuales debías clasificar todos los conceptos que integraban una temática particular, en un mapa mental deberes elegir un concepto central del que irradiarán el resto de ideas.
Los mapas mentales constituyen herramientas más personalizadas que los mapas conceptuales, ya que su lógica va más enfocada a una comprensión más creativa que crítica. Es decir, no es tan riguroso como el mapa conceptual en cuanto a la necesidad de establecer una jerarquía cerrada y clara y, por ello, usa ciertos mecanismos más versátiles y menos rigurosos.
Contenido muy visual
Con dibujos, fotografías, imágenes, símbolos, colores, etc. Es decir, usa el pensamiento visual puro y no su variante de sketchnoting.
Palabras clave
Palabras clave que faciliten el entendimiento, en vez de enunciados largos.
No hay relación entre nodos
Ya que se deja lugar a la intuición.
Conexiones
A veces son difusas, no como en los mapas conceptuales donde debían ser relaciones y patrones claros.
Forma de plasmar el tema
En vez de plasmar un tema de manera deductiva, lo hará de una manera irradiante.