Presta atención
La capacidad de un equipo no es la suma de los talentos de los individuos que lo componen, sino que es mayor. Esto es lo que llamamos sinergia.
La capacidad de un equipo no es la suma de los talentos de los individuos que lo componen, sino que es mayor. Esto es lo que llamamos sinergia.
La sinergia es positiva si el equipo es el adecuado, pero es importante que entiendas cómo medir el rendimiento de un equipo para saber si es el idóneo. Los indicadores que te ayudarán a determinarlo son:
¿Consigue tu equipo los resultados esperados? Si la respuesta es afirmativa, es buen comienzo, pero aún queda camino por recorrer.
La eficiencia va un paso más allá de la eficacia. Un equipo eficiente no solo cumple con los objetivos, sino que lo hace usando los menores recursos posibles.
Si a la eficiencia le añadimos la productividad, entonces los/as miembros de un equipo no sólo sacarán adelante tareas ahorrando recursos, sino que, además, serán capaces de saber qué labores deben hacerse primero, en cuáles es más conveniente esforzarse más para elevar su calidad y cuándo es mejor sacarlas adelante sin demasiado esfuerzo.
En resumen, un equipo productivo mide sus fuerzas y sus recursos y sabe a qué objetivos debe dedicarles más tiempo y esfuerzo.
Aunque es positivo que un equipo establezca mecanismos y protocolos a seguir en el trabajo diario, es necesario que también sea capaz de introducir novedades o cambios para mejorarlos.
La resiliencia es la capacidad de superar obstáculos y salir fortalecido de su resolución. Dicho de otra manera, la resiliencia es sacar provecho de una crisis.